España ya está en cuartos de final. Con sufrimiento, pero la selección de Vicente del Bosque superó a Portugal y, de paso, devolvió a los lusos la moneda de aquella eliminación de la que hablaba, aquel partido que nos dejó fuera de la Eurocopa de 2004. La historia en Ciudad del Cabo fue distinta y 'La Roja' ya se encuentra entre las ochos mejores de este Mundial.

El encuentro de hoy, en su primera mitad, contó con un buen comienzo para los intereses españoles, con dos tiros a gol muy peligrosos. Sin embargo, a medida que avanzaba el duelo ibérico, se notaba que gastábamos mucho tiempo en elaborar cada jugada y la selección daba a Portugal la oportunidad de cerrar nuestros caminos para llegar al gol. Además, como nos sucedió en el encuentro inaugural contra Suiza, tampoco estábamos en el último pase, el decisivo, el que marca la diferencia y permite superar al rival.

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En la segunda parte, España siguió con su fútbol. Era cuestión de tiempo. Y sí, llegó la recompensa con un tanto de Villa -quién sino-, en una perfecta jugada que es el mejor exponente del fútbol que acredita a esta selección.

El cambio de Fernando Llorente por Fernando Torres, a mi modo de ver, ha sido la sustitución adecuada porque el riojano ha creado dudas en la defensa lusa: dos remates de cabeza con mucha atención y una ayuda constante a balón parado. Mantuvo en vilo a los centrales. El dominio de 'La Roja' era apabullante, sin que Portugal pudiera encontrar el balón. Y salvo al final, al equipo de Carlos Queiroz no se le vio en la segunda mitad.

Hay que destacar el choque, en general, de todo el equipo. De todos los que saltaron al campo. Sin embargo, David Villa ha sido un estilete muy peligroso desde el principio. Además, Xavi e Iniesta en la segunda mitad han realizado últimos pases preciosos y precisos. Y el que está enorme físicamente es Sergio Ramos, que incluso pudo conseguir un gol en una jugada individual.

Enfrente, Portugal no llegó mucho al área española, pero sobre todo daba sensación de peligrosidad en jugadas a balón parado y en la primera mitad. Y Cristiano estuvo desaparecido en combate: con un equipo eminentemente defensivo, el futbolista del Real Madrid no puede brillar ya que las asistencias no le llegan con ventaja.

Este triunfo acrecienta la moral de 'La Roja', que a medida que avanza el campeonato va recobrando su juego, y sobre todo dando los futbolistas una imagen de estar mejor cada día.